miércoles

#CUÉNTALO

Esta entrada no pretende ser tanto un consejo como un relato personal, puesto que la experiencia Erasmus depende de muchos factores (tanto del contexto como de la personalidad de cada un@).

Es muy importante que comuniques al tutor/a todo lo que ocurre desde el principio (en el caso de que te afecte de alguna forma). Tanto relacionado con la empresa con como te sientes tú. Que se entere bien de lo que pasa y que no haya interpretaciones. Y que quede bien claro que tu bienestar está por encima del éxito que pueda suponer finalizar una beca (en cualquier sentido y para cualquiera de las partes).

Puede ser que por alguna razón no estés bien pero decidas que la situación en la que te encuentras "es la que te ha tocado" y vas a hacerle frente "sea como sea". Puede ocurrir que finalmente "salgas más fuerte", pero sopesa si realmente merece la pena pasar por ese trago. A veces es mejor alejarse, volver, porque si pasas mucho tiempo en una situación estresante,  una vez en casa, al cambiar el escenario y volver a la realidad, puede que toda la mierda que te habías tragado asome a la superficie.

En mi caso yo no hablaba alemán y no me adapté al idioma (ni al gris de los primeros meses). Había un chico que sabía inglés, pero no quería hablarlo; nada más que en casos contados. No se me asignó un tutor de prácticas y no me dieron herramientas hasta que las pedí (total, para lo que luego las utilicé). Yo notaba el ambiente enrarecido y me sentía bastante incómoda, pero pensaba "espero un poco más", hasta que decidí hablar con mi jefa. No voy a reproducir aquí la conversación, pero para nada me sentí atendida ni tenida en cuenta, todo lo contrario, me vi señalada como un problema. Y digo yo... si había detectado esa problemática... ¿no podría haberlo comentado ella? En vez de cambiar su actitud conmigo y hacerme el vacío. Aunque sea un simple "mira... es que no tenemos mucho trabajo y como no te adaptas pues mejor solo miras y limpias, ¿vale?".

Perdona, pero por mucho que me digan "tú eres una Erasmus, no te tienen que comunicar nada, ni darte explicaciones, tú vas allí y pasas el día y ya está" a mí eso no me vale. ¿Qué cuesta hablar y comunicar? Soy una persona que está dedicando 9 horas al día de su vida (11 si contamos desde la hora que me levanto y el tiempo de ir y venir). Aunque solo esté limpiando la mayoría de las veces, estoy realizando una labor para la empresa, a mí me habría gustado un mínimo de interés en mi persona.

En relación al ambiente laboral:  la relación con algunos compañeros era bastante desesperante. Me tragué comentarios (muy ofensivos y desagradables) y actitudes machistas, los cuales tampoco voy a comentar aquí.

De nada sirve decir "no me habléis así que me molesta", mi opinión y mi sentir no se tomaron en cuenta. Estaba en "su territorio" donde su criterio es el que imperaba. Lo dejaron bien clarito cuando seguían comportándose igual después de manifestar mi postura repetidas veces.

Que este tipo de situaciones abunde no las convierte en "normales", ni "naturales" ni mucho menos "aceptables" o "inamovibles". Ya va siendo hora de que se cambie el punto de mira, ¿no?

-Se me viene a la cabeza un lema que se escucha últimamente, ese de "queremos ser libres, no valientes". -


YO ahora hago balance y obviamente habría salido por patas de allí, pero ya digo que una decisión depende de cómo interpretes en ese momento y puede influir tanto el "tengo que hacerme fuerte y superar esta situación", como el "no importa" (WTF?), el hecho de "tener que devolver la beca" o que no haya comunicación con tu tutor, por la razón que sea.

PERO a lo hecho, pecho.  Ahora toca aprender de lo vivido y terminar de vomitar la mierda que me he tragado estos meses atrás.

Por otro lado, claro que he tenido experiencias chulas, no ha sido todo un infierno. Muestra de ello son el resto de entradas del blog.

NOTA: Agradezco mucho el haber compartido momentos con Sven y Jutta... y haber saboreado los ricos platos preparados con cariño por Bernhard... y los mimos de Curri.